No sé cuánto estuve en estupor.
No sé si dejé de amarte. Parece que no. El mismo amor platónico igual de intenso. Igual de musical. Igual de ciego, igual de...mente.
Sigo amándote a través de tu música. Sigo, deseando tu piel a la luz suave de un día nublado. Sigo deseando tardes que parecen interminables en silencio y abrazado a toda tú.
Sigo deseando conocerte en todas mis vidas, y enamorarme así de intensamente en cada una de ellas.
Sigo creyendo en ése beso. En ésa emoción. Reactiva. Inevitable. Natural.
Creo en nuestras espirales, intersectando. Una, dos... más veces. Yendo y viniendo. Creo en tus ojos igual de profundos cuando duermes, que cuando me miran. Creo en tu nostalgia de todo lo bello, perfecto y anataño. Creo en tu cabello y su aroma alucinante.
Te extraño. Como siempre, como cada noche dentro de mi mente. Como si no hubiera tiempo. Te extraño eternamente.
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